A continuación especificamos con más detalle los consejos referidos:

• Evite decidirse por uno u otro cirujano sólo en función del precio del tratamiento. Los precios bajos pueden ir en detrimento de la calidad de los materiales o del servicio. Por tanto, debe informarse bien acerca de la calidad de los instrumentos que van a usar.

• Escoja un cirujano titulado en Cirugía Plástica y Reparadora y compruebe que ha conseguido el título de especialidad por los procedimientos legales establecidos en España. Puede consultar estos y otros datos en el Colegio de Médicos de su provincia. Procure que sea un cirujano con experiencia y bien preparado; ha de conocerle bien antes de la intervención para que encuentre la solución más adecuada a su caso. Hable con él pregúntele todas las dudas, inquietudes o aspectos que desconozca: Anestesia, postoperatorio, recuperación de cicatrices, etc.

• Solicite una entrevista previa con el anestesista, pieza clave en el quirófano. También puede pedir conocer previamente al resto del equipo y verificar su acreditación profesional.

• Exija que le informen por escrito sobre en qué consistirá la intervención, métodos que se utilizarán, contraindicaciones, etc. Le conviene conocer todos los riesgos de la operación: Posibles infecciones, malcicatrización, hemorragias, etc. La publicidad forma parte del contrato, por lo que debe solicitar que sea veraz en todos los servicios que se le ofrezcan.

• Antes de la operación deben realizarle exámenes preoperatorios, normalmente distintos análisis: de sangre, clínicos, cardiológicos..., según la operación que se trate. Asegúrese de que en su caso también lo haga.

• Guarde todos los documentos que le vayan entregando sobre su tratamiento por insignificantes que parezcan. Si tiene que presentar una reclamación deberá ser capaz de aportar pruebas documentales (publicidad, presupuestos, facturas...) y, en su caso, demostrar la existencia del daño y perjuicio y la relación que le une al médico o centro hospitalario que realizó su intervención.

• Como paciente, tiene derecho a obtener una copia completa de su historia clínica, documento fundamental en todas las reclamaciones por negligencia médica hospitalaria.