Consiste en que cada trovador o trovero solicita al público que le aporte un verso octosílabo sobre el tema que desee, y el repentista está obligado a improvisar una décima-espinela que debe de terminar forzosamente con el verso propuesto.

Las siguientes estrofas son un ejemplo de esta faceta, recopiladas de una actuación realizada recientemente.

Verso propuesto por el público: “LA JUSTICIA Y LA RAZÓN”
Un fugaz razonamiento
en este sentido haré
y en el mismo expresaré
lo que pienso y lo que siento.
Aunque comprender intento
no encuentro la explicación
puesto que en su aplicación
causan multitud de heridas;
parece que estén reñidas
LA JUSTICIA Y LA RAZÓN.

Fuente: www.trovos.com