El bacalao salado ha sido tradicionalmente, uno de los pescados más consumidos en Murcia, aunque naturalmente siempre llegado desde fuera del país. Su consumo se explica por el hecho de que sea un pescado con el que siempre se han hecho salazones, cosa que daba la posibilidad desde antiguo de poder consumirlo cuando aún el pescado no tenía la posibilidad de ser transportado en condiciones que aseguraran su conservación.
Y en la huerta de Murcia, sobre todo en sus Vegas, el bacalao venía a ser el producto estrella durante la cuaresma.
Una de las recetas más típicas de la primavera eran las albóndigas de bacalao, una especialidad que se mantiene en algunas casa, sobre todo de la Vega Media, como recuerdo de la cocina tradicional y de las costumbres culinarias.
Ingredientes
- Bacalao salado
- Huevo
- Pan
- Perejil
- Ajo
- Cebolla
- Tomate
- Pimentón
- Alcachofas
- Patatas
Preparación
Las albóndigas se preparan con migas de bacalao desalado la noche antes de su preparación. Para confeccionarlas se une el bacalao con un huevo, un diente de ajo picado, perejil y algo de pan duro o pan rallado.
Preparadas las albóndigas hay que sofreírlas en una sartén con aceite, y ya fritas se apartan y se fríen las alcachofas (si queremos incluirlas en nuestro plato). En el mismo aceite de las albóndigas se prepara el sofrito del guiso, cebolla, tomate y, al final, un poco de pimentón.
Los dos elementos del guiso están listos, sólo quedará poner las albóndigas en una olla con agua, añadir el sofrito y cocer todo a fuego moderado hasta que esté bien cocido, de 30 a 45 minutos de cocción y unos 20 minutos antes de concluir podrán añadirse unos cortes de patata. Y ya estará listo este antiguo plato de la cocina murciana.