El Campo de Cartagena y algunas áreas del Valle del Guadalentín se convierten en verano en amplios campos dedicados al cultivo de melón. La variedad más popular es el piel de sapo, pero a este se unen el amarillo y los pequeños galia y cantaloup serigrafiados, estos dos últimos de una fragancia y colores realmente atractivos. La variedad tendral, la oriunda de estas áreas, fue desapareciendo con la remodelación de los cultivos, pero aún hoy se pueden llegar a observar tendrales en alguna finca, melones tardíos que llegaban a poder ser consumidos en invierno gracias a la dureza de su corteza.
Muchos restaurantes de los municipios del campo cartagenero sirven en sus menús esta sencilla receta del melón a la cazuela, una original forma de consumir el producto, especialmente si, tras abrirlo, no resulta tan dulce como esperábamos.
Ingredientes
Melón
Licor
Elaboración
Sólo necesitamos melón, en este caso disponemos de un surtido de galia, cantaloup y piel de sapo. Extraeremos porciones de melón con un saca bolitas, si disponemos de él, y lo iremos dejando en una cazuela de barro. Añadimos un licor, puede valer cualquiera pero recomendamos un licor de hierbas dulce y aromático. Calentaremos un poco la cazuela, no demasiado, y flambearemos.
Si el melón escogido no está maduro siempre podemos preparar un poco de almíbar en la misma cazuela, unas cucharadas de azúcar y un poquito de agua. Y hecho el almíbar añadiríamos el melón y el licor.
Lo dejamos que se enfríe un poco y lo presentamos, bien en la cazuela o en otro tipo de bol. Y listo para servir.