Rellenar una masa para freír u hornear forma parte de las recetas más elaboradas de la cocina. Los pasteles rellenos y las empanadillas se encuentran en el recetario de la gastronomía murciana, destacando siempre los pasteles de carne, las empanadillas de tomate y el pastel de Cierva.
Pero, además de las recetas más populares, también existen ejemplos como estos pasteles de pollo, receta tradicional que en ocasiones tenía como destino el aprovechar una carne cocida sobrante u ofrecer dos platos o una sopa con entrantes.
Ingredientes
Pollo cocido
Caldo de pollo
Vino
Harina
Huevo duro
Tomate
Elaboración
La carne cocida de pollo se trocea y limpia de pieles, huesos, nervios y cartílagos. Debemos reservar un vaso de caldo de la carne cocida, que siempre quedará más gustoso si añadimos zanahorias, judías y apio, además de proporcionarnos un segundo plato, ya sea caldo o sopa con aletría.
Limpio el pollo, se reserva mientras se prepara con unos tomates maduros un frito de tomate.
Mientras, se prepara la masa de los pasteles. Para unos 300 gramos de harina bastará con medio vaso de caldo de pollo y medio de vino. En todo caso, la masa debe quedar metida en harina como cualquier masa de pan o bollería. Una vez preparada se deja reposar.
Cuando el frito de tomate esté hecho, se añade el pollo y se deja calentar unos minutos para que mezclen bien los sabores.
Para rellenar los pasteles basta con estirar bien la masa con un rodillo, dejándola fina, hacer porciones (un vaso o taza sirven de molde) y rellenarlos con el pollo, trocitos de huevo duro e, incluso, chorizo si se desea.
Rellenos los pasteles, sólo quedará freírlos en una sartén con aceite de oliva. Podrían hornearse pero esta receta es tan tradicional como el hecho de que, antiguamente, no todas las cocinas podían disponer de hornos.