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COFRADIAS DE PENITENCIA

Las Cofradías de Pasión comienzan su existencia en la baja Edad Media (siglos XIV y XV), pero se asientan definitivamente en el siglo XVI. El Concilio de Trento, con el fin de fortalecer la fe del pueblo en la Iglesia, incita a dar culto a imágenes que despierten devoción popular, a través de la Pasión del Señor en cortejos procesionales, en las calles de las ciudades, con reglas de fácil cumplimiento por parte de los hermanos cofrades. Las Cofradías nacen vinculadas a Conventos e Iglesias, encargando a escultores imágenes en madera policromada para que quede escenificada en los distintos "pasos" la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.

Las principales representaciones serían las de Cristo Crucificado y la Virgen María enlutada.

COFRADIAS EN MURCIA

En Murcia hay en la actualidad quince Cofradías que desfilan desde el Viernes de Dolores hasta el Domingo de Resurrección. Nuestra Semana Santa es valiosísima en cuanto a las imágenes que se portan en los "pasos" y muchas de ellas reciben culto en distintas iglesias; otras están expuestas a lo largo de todo el año en distintos museos como el Museo de Salzillo o el Museo de La Sangre.

La tradición del nazareno en muchísimas ocasiones pasan de generación en generación y forma parte de la vida de una familia.

Hay variedad en cuanto a los desfiles se refiere; desfilan procesiones de riguroso silencio como es el caso de las Cofradías del Cristo del Refugio, de La Salud, del Rescate, de la Fe y del Yacente; otras son de las llamadas tradicionales donde los nazarenos estantes que portan los "pasos" llevan la túnica corta al estilo huertano asomando tímidamente los bordados de las enaguas, medias de repizco y esparteñas.

Estos nazarenos, además de los típicos recordatorios reparten a lo largo del recorrido caramelos, huevos cocidos con mona y habas de la huerta, recordando así tiempos pasados de hambre en la zona, donde en estos días se repartían viandas de comida para aliviar el hambre de los mas necesitados.

Distintos momentos de la vida de Jesús de Nazaret quedan plasmados de las manos de numerosos imagineros en un total de casi ochenta tronos o "pasos" que desfilan en procesión acompañados por nazarenos penitentes y mayordomos, destacando las obras del prestigioso escultor murciano Francisco Salzillo.