El templete es un edificio de estilo barroco y planta hexagonal inscrita en una circunferencia, se distinguen en su construcción cuatro cuerpos: el pódium, en que se apoya el edificio y del que sobresalen los pilares, el cuerpo principal que cierra el espacio y configura el monumento, la cúpula sobre tambor cubierta de teja árabe y, por último, la linterna dotada de seis vanos. La obra es del arquitecto murciano José López. Su construcción se inició en 1762 y concluyó en 1801. Este edificio también es conocido como El Bañadero, aludiendo así al acto ritual que cada 3 de mayo se realiza en él desde 1384 y que -bien puede decirse- ha sido la génesis de la fiesta que en la primera semana del mes de mayo se celebra en honor de la Stma. y Vera Cruz de Caravaca.

Monumento erigido en 1780 por el colegio de Caravaca sobre la alberca natural de división de las aguas que procedentes de las fuentes del Marqués, riegan la huerta.
La alberca se utilizaba para saciar la sed de los rebaños que pastaban en las inmediaciones del pueblo, conociéndose su ubicación por la torre de la antigua ermita de la concepción, situada a su vera, conocida por este motivo con el nombre de "Torre de los pastores". Es un edificio de planta circular en la que se encuentra inscrito un octógono regular cuya estructura deja adivinar su función: la exaltación de la cruz y el baño y santificación de las aguas que riegan la huerta. Los ángulos del octógono son ocho columnas de orden dórico adosados a pilastras sobre las que corre el entablamiento. Cada una de estas columnas está rematada a modo de pináculo por motivos ornamentales de tipo geométrico que terminan en esferas. Ocho arcos de medio punto en los espacios interpilastras sobre las que a manera de clave, se inserta un motivo ornamental repetido en siete de ellos: se trata de un original medallón de estuco, formado por dos estilizadas ménsulas que albergan en su centro la cruz de cuatro brazos sobre una nube. La fachada principal pierde este motivo decorativo trocándolo por un escudo real barroco, orlado por el Toisón de oro, en piedra caliza gris. El edificio es todo de sillería hasta el entablamento.

Junto al templete se encuentran la casa de la cultura y la Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción.
La Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción es contemporánea a la Parroquia de El Salvador, pero construida con materiales más modestos, constituye un buen ejemplo de arquitectura religiosa popular. Elemento importante es el artesonado mudéjar de madera policromada que apoya su estructura en seis columnas dóricas embutidas en las paredes de la única nave del templo sobre la que cruzan los respectivos arcos de medio punto donde cargan las vigas de madera. Destaca en esta iglesia su esbelta torre rematada por un campanario construido en el siglo XVIII, conocida como "Torre de los Pastores", torre que tiene cuatro cuerpos: tres de sillería y el cuarto que remata con ladrillo macizo. Asímismo es de destacar el retablo mayor, del siglo XVIII, y la imagen de la Purísima de Manuel Caro Fernández, discípulo de Salzillo.