Como ocurre con otras poblaciones de la zona, como El Berro, apenas existe documentación histórica que nos refiera el origen y evolución de estas villas de población dispersa, enclavadas en parajes naturales de gran belleza pero, al mismo tiempo, limitadores de la evolución demográfica de estas zonas.
La Historia de Gebas ha estado marcada por la orografía del terreno que ocupa la rambla de Algeciras, que atraviesa la pedanía, en cuyo profundo barranco se han ido creando pequeños núcleos de casas. En total existen cinco grupos de viviendas que se denominan: 'La Balsa Nueva', 'El Mojón', 'Jalisco', 'Las Casas de Abajo' y 'Las Casas de Arriba'.
No se tienen datos sobre asentamientos prehistóricos o romanos en esta zona, pero sí se tiene constancia de que han existido durante siglos pequeñas huertas, que sirvieron para alimentar a la población, regadas con el agua de la rambla de Algeciras. No obstante en las inmediaciones de Gebas, al oeste de la presa de la rambla mencionada, en el Cabezo de la Fuente del Murtal, se ha encontrado un yacimiento con restos protohistóricos.
Vestigios de obras hidraúlicas
La evolución de Gebas dependió siempre del aprovechamiento de sus abundantes recursos hídricos, y prueba de ellos son los restos de antiguas obras hidráulicas, destinadas a aprovechar el agua de la rambla de Algeciras. Hasta 1872 la pedanía estaba comunicada con los pueblos aledaños por caminos reales o veredas, pero en esta época se construyó la carretera Cieza-Mazarrón, lo que propició el desarrollo de la zona y la construcción de dos posadas, en donde se podían alojar los viajeros.
Gebas se constituyó como rectoría independiente el 9 de mayo de 1888, por decreto del Obispo Tomás Bryan y Livermore, que declaró al Berro y Gebas como rectorías independientes de la Parroquia. En 1893 quedaría inaugurada la ermita de la Purísima. Cuando en 1891 se inician las tareas de repoblación de Sierra Espuña, dirigidas por el ingeniero de montes Ricardo Codorniú, se establecieron en Gebas algunas familias, a las que se les habían expropiado los terrenos. Es en esta época cuando se construyó el embalse del Saltador. El sistema de riego abastecía ambas márgenes de la rambla pero, tras una gran riada, el puente que cruzaba el barranco fue destruido, concentrándose la zona de regadío en la margen izquierda hasta llegar a las proximidades de la zona lunar de los barrancos. Entre estos regadíos cabe destacar el de la Mina del Barranco Blanco, que conduce las aguas hasta la Finca de la Zorija, y cuya construcción se realizó en torno al 1900.
Siglo XX
A partir de 1900 el número de habitantes ha ido fluctuando, influenciado por el desarrollo en la zona de obras de ingeniería como el canal del Taibilla en 1950 o la presa de la rambla de Algeciras y el túnel de Gebas a Carmona en 1959. Esta presa no llegó a concluirse, quedando en la actualidad algunos restos. Fue durante la perforación del túnel cuando se atravesó un pequeño venero de aguas, que se convertiría en la primera fuente pública de la localidad, inaugurada en 1960 con el nombre de Aguas de la Inmaculada. Otra de las conocidas fuentes de esta zona es la fuente de Las Hedientes o de La Atalaya, situada en la margen derecha de la Rambla Algeciras y cuyas aguas eran trasladadas a caballo a los Baños de Alhama.
A partir de la década de los 60' muchos de los vecinos emigraron hacia otros núcleos urbanos, quedando las casas de labranza deshabitadas. A partir de la última década del XX, algunas de estas casas han sido restauradas y habilitadas como casas para turismo rural, y aunque el número de habitantes de la localidad no llega a la veintena, estas rehabilitaciones de antiguos caseríos hacen de Gebas un pueblo residencial para muchos turistas en periodos vacacionales.