La Bastida de Totana es uno de los primeros yacimientos conocidos de la Cultura Argárica. Fue dado a conocer por el Ingeniero de Caminos Rogelio Inchaurrandienta en 1869 aunque su adscripción formal a la citada cultura no se produjo hasta unos años después, cuando gracias a los trabajos que el Ingeniero Belga Luis Siret había desarrollado en otros lugares de Almería y Murcia, se produjo el descubrimiento de gran número de yacimientos con una cultura material muy similar.
La Bastida de Totana es uno de los yacimientos argáricos más importantes excavados hasta la fecha. Se calcula que habría entre 200 o 300 viviendas lo que lo debió convertir en un poblado principal, de carácter nuclear, que controlaba desde su posición una amplia extensión de terreno apto para los trabajos agropecuarios y del que seguramente dependerían otros pequeños asentamientos en llano.
Recientemente se han realizado en el yacimiento trabajos de limpieza y mantenimiento de los restos excavados con vistas a su futura integración en un centro de visitantes. Se convertiría, junto con el poblado argárico de Los Cipreses (Lorca) en los dos únicos yacimientos extraurbanos musealizados en la Región de Murcia.