Celebración: en los meses de enero-febrero
Las zonas residenciales de Mortí pueden disfrutar de una manera especial de las fiestas patronales de Totana, dedicadas a Santa Eulalia, ya que la tradicional romería que convoca a tantos vecinos todos los años hace un recorrido por la carretera principal de los dos Mortí.
Las celebraciones que se llevan a cabo en el santuario de La Santa son para los vecinos de Mortí algo especialmente cercano. La romería da comienzo a las fiestas, la patrona es traslada desde su ubicación en el santuario hasta la ermita de San Roque, para su posterior traslado a la Iglesia de Santiago.
La noche antes de su traslado los romeros hacen vigilia en el santuario, disfrutando de unas migas que hacen más llevadera la espera y el posterior camino, que comienza muy pronto por la mañana.
En su bajada y camino por los huertos de Mortí, los vecinos saludan a la patrona con pequeños altares, y convidan a los romeros, en especial a los estantes, a dulces que les ayuden a reponer fuerzas ante un camino aún largo. Terminadas las fiestas la patrona vuelve a su santuario, y los romeros la vuelven a acompañar en la subida a La Santa.
La romería se remonta al siglo XVII, momento en el que ya se tienen noticias de la afluencia de peregrinos al santuario, atraídos por los milagros de la Virgen. Los peregrinos se resguardaban en la antigua ermita del frío y, durante la vigilia, los mayordomos les ofrecían comida y bebida para reponerse del camino y aguantar las bajas temperaturas del invierno.