El Parque Regional de Sierra Espuña se localiza en el centro geográfico de la Región de Murcia. Su amplio gradiente altitudinal sumado a unas condiciones climáticas extremas, le confiere unos hábitats bien diferenciados: extensas superficies de bosques y matorral mediterráneo, zonas elevadas de cumbres y roquedos, y áreas umbrosas de barrancos, arroyos y fuentes.
Los recursos forestales de este espacio natural fueron aprovechados desde siglos atrás, siendo en la era cristiana, tras la Reconquista, cuando el bosque dominado por el pinar y el encinar comienza su declive debido al incontrolado uso maderero, dejando un paisaje desolador. Los problemas de erosión devinieron en riadas que anegaban campos y aldeas. Este hecho motivó el comienzo de los trabajos de restauración hidrológico-forestal a partir de la última década del siglo XIX. Los grupos de obreros, dirigidos por ilustres ingenieros, construyeron kilómetros de muretes de piedra, sendas, caminos, diques y albarradas que permitieron contener las avenidas de agua tras las lluvias torrenciales. De esa forma, las distintas especies vegetales protagonistas de la repoblación crecieron y crecen fructíferamente en sus laderas hasta nuestros días.
Los senderistas que recorren este preciado legado de sendas y caminos son testigos de una gran variedad de ambientes naturales, los cuales han originado que Sierra Espuña posea cerca de mil especies vegetales distintas, representando el 33% de toda la vegetación de la región murciana.
Siempre que te adentras en la sierra y conoces su pasado, te agolpa la misma pregunta: ¿cómo la intervención humana hace ya más de un siglo ha podido legarnos este milagro forestal?. En las manos del hombre se conjuga el poder de destruir y la capacidad de crear y restaurar. Esta última virtud es la esencia de lo que hoy es Sierra Espuña.
Los tres itinerarios señalizados que os proponemos recorren de manera sencilla y sin grandes esfuerzos parte del patrimonio histórico y cultural que el paso del hombre legó en estas tierras. El sendero Ricardo Codorníu y la Senda de las Alquerías se localizan en los centros neurálgicos de la interpretación y educación ambiental en el Parque, Huerta Espuña y Las Alquerías. Partiendo desde el Centro de Visitantes y desde el Aula de la Naturaleza respectivamente, ambos senderos transitan bajo valiosos doseles forestales consecuencia de aquellas magníficas repoblaciones. Por otro lado, el sendero del Mirador del Corazón de Jesús parte otro núcleo histórico, éste de carácter religioso, de gran importancia en la Región: el santuario de Santa Eulalia de Mérida.
El milagro natural de Espuña es el empeño de los hombres del pasado y el profundo agradecimiento de los que hoy la recorremos.