Esta fortificación se encuentra en pleno casco urbano de Cartagena, sobre la más alta de las cinco colinas que caracterizaron a la ciudad durante la Antigüedad. Se trata de un estratégico cerro situado al norte de la espléndida bahía natural, por lo cual desde este enclave era posible dominar tanto el puerto como buena parte de la planicie septentrional que se extiende entre las sierras de oriente y occidente.
En la actualidad los accesos al castillo se realizan por una carretera que, desde el paseo de la Muralla del Mar, conduce hasta la cima, o bien se puede subir a través del ascensor panorámico situado en la calle Gisbert. La calle de la Concepción, situada en la fachada septentrional del monte, y que llevaba también hacia la fortaleza, está actualmente inaccesible en sus últimos tramos a causa de las obras de restauración del teatro romano.
Los restos que hoy podemos contemplar del castillo de la Concepción se han de identificar con una serie de estructuras correspondientes a una fortificación de origen medieval. En su mayor parte parece ser una alcazaba islámica cuya construcción se podría situar en torno al siglo XII, al igual que otras existentes en su contexto geográfico e histórico. El elemento más característico de la fortaleza es el Macho o torre del homenaje, que domina en el punto más alto todo el conjunto. Sin embargo, este edificio hay que datarlo ya en torno a los años finales del siglo XIII o comienzos del siglo XIV.
La fortaleza de Cartagena, o castillo de la Concepción, es Bien de Interés Cultural por la Disposición Adicional Segunda de la Ley 16/1985, de 25 de junio del Patrimonio Histórico Español.