La pedanía fuentealamina de Los Cánovas estuvo muy relacionada a lo largo de la historia con su vecina de Cuevas de Reyllo, hasta el punto de considerarse parte de aquélla, como una calle más.
El origen de esta villa como el de otras del municipio, Los Paganes, El Escobar o Los Almagros, se encuentra en la compra de terrenos por parte de hacendados durante la repoblación del siglo XVI.
Su cercanía a las faldas de la Sierra de Carrascoy y al relieve de la Sierra del Algarrobo hace de la zona un lugar muy apreciado por los aficionados al senderismo y a las excursiones.
El pueblo cuenta con un centro social activo durante todo el año ya que si durante el curso lectivo se ofrecen en él todo tipo de cursos de formación y un aula con acceso a Internet, durante el verano se abre para dar clases de apoyo a los estudiantes de la villa así como para la impartición de actividades lúdicas.
Uno de los viejos molinos harineros de la zona, tras su restauración, ofrece a vecinos y visitantes a lo largo del año exposiciones y belenes en época navideña.
La economía de Los Cánovas se basa en el sector agropecuario, atesorando este destacados cultivos de limón, olivos y almendros, así como granjas de ganado porcino y ovino. Las industrias que derivan de este sector, como el de estructuras metálicas o maquinaria agrícola, también están representadas en la villa.