Benablón
Historia y Patrimonio
El topónimo de esta pedanía 
de Caravaca tiene raíces árabes, como ocurre con otros de la Región como Beniel ("ben" significa hijo de), apuntando algunos investigadores al nombre árabe Ibn Ab Harum como origen del mismo. Algunos de los restos arqueológicos hallados en el entorno de la localidad certifican los asentamientos árabes en la zona. Pero, además de los restos medievales, algunos yacimientos como el del Cerro de la Carrasca han dejado materiales y estructuras de fortificaciones que se han situado, cronológicamente, en el período tardorromano y visigótico. En Casa de los Picones se encontraron materiales de un hábitat medieval islámico y en Torre de los Alcores, los materiales nos hablarían de un poblamiento de época medieval cristiana.
Como ocurriera con otros ámbitos del norte de Murcia, Caravaca sería, por su cercanía a los límites fronterizos con el reino musulmán de Granada, una zona despoblada en el siglo XIV. Pese al valor estratégico de sus fortificaciones, especialmente del Castillo de Caravaca de la Cruz, las tensiones con el último reducto musulmán de la Península convirtieron su geografía en un ámbito peligroso, debido a las continuas escaramuzas y razzias de los musulmanes granadinos.
A partir del siglo XVI el aumento de población de Caravaca fue considerable y sus tierras, dedicadas tanto a cultivos como a pastos para ganado, contribuyeron decididamente a este aumento poblacional.
En documentos fechados en 1568, 1571 y 1577 se puede leer ya el topónimo de Benablón. También contribuyó al crecimiento demográfico del municipio la reliquia de la Vera Cruz, y fueron varias las órdenes religiosas que se establecieron en Caravaca.
En 1617 comenzaron las obras del Santuario de la Vera Cruz. Dichas obras concluyeron en 1703. En 1730 Benablón contaba con cinco familias de hijosdalgo, otro dato que confirmaría la prosperidad de la población. En este siglo es construida una pequeña ermita dedicada a San Antón. En 1973 sería construida la actual, debido al deterioro del primer edificio y a su escasa capacidad. Aunque Benablón siempre perteneció a la jurisdicción del Ayuntamiento de Caravaca, durante la Edad Contemporánea llegó a estar regida por el Ayuntamiento de Archivel, entre 1821-1823 y entre 1837-1847.
Naturaleza
Benablón limita al norte con la Sierra del Gavilán incluida en la lista de Lugares de Importancia Comunitaria (LIC). Es un espacio de casi 4.000 hectáreas de media y alta montaña con grandes pendientes en las que hay grandes extensiones de Pinus pinaster o pino negral y Pinus halepensis o pino carrasco. Abundan también, la coscoja (Quercus coccifera ), la sabina mora (Juníperus phoenica) y los prados de gramíneas perennes como Brachypodium. En las zonas de cota más baja abunda el esparto. Es de destacar la presencia de endemismos de la flora silvestre protegida de la Región de Murcia como Thymus funkii o tomillo silvestre.
Entre los grupos de fauna más representativos se encuentra el de las aves rapaces, destacan el búho real (Bubo bubo), el águila real (Aguila chrisaetos), el águila culebrera europea (Circaetus gallicus) y el halcón peregrino (Falco peregrinus). También es importante la presencia de chova piquirroja (Phyrrocorax phyrrocorax).
Algunas especies de mamíferos que habitan la Sierra del Gavilán son el jabalí (Sus scrofa), el zorro (Vulpes vulpes), la Garduña (Martes foina) y la gineta (Genetta genetta).
En total se contabilizan 15 hábitats de los cuales 4 son prioritarios y 11 de interés comunitario.
Gastronomía
Dentro de las costumbres culinarias de Benablón se conservan los platos más tradicionales de la cocina del noroeste de la Región de Murcia. Bien surtida con productos agrícolas de la Vega de Caravaca y de carnes de gran calidad entre las que hay que destacar la del cordero segureño, una raza española de ganado ovino adaptada a las condiciones climáticas de las Sierras del Segura y La Sagra así como a las zonas altas de la ribera del Río Segura. Con él se elaboran platos tan típicos como la tartera caravaqueña o los guisos de cordero. También con los productos obtenidos de la matanza del cerdo se confeccionan recetas que han perdurado en el tiempo de generación en generación como la olla de cerdo o los embutidos.
Los arroces son otra de las preparaciones populares en la pedanía, no suelen faltar en la celebración de las fiestas patronales o en las reuniones familiares.
La repostería también ocupa un lugar relevante en las cocinas de Benablón. Dulces como el Alfajor, de origen árabe y típico en las navidades, las yemas o los suspiros son algunos ejemplos.
Economía
La economía de Benablón se ha basado fundamentalmente en la agricultura de secano con los cultivos de cereal principalmente junto con olivo y almendro y algo de regadío. Las tierras que rodean el núcleo urbano de esta pedanía siguen estando dedicadas a estos cultivos, pero las de regadío se han ampliado gracias a los nuevos sistemas de riego localizado. No obstante, en los últimos tiempos, la economía del municipio se ha diversificado y cuenta con otros sectores en los que apoyarse.
A tan sólo tres kilómetros de Benablón hay un área de servicios en la que se encuentra el polígono industrial de Venta Cavila. En él se han establecido algunas empresas dedicadas a muy diversas actividades, en los alrededores de este polígono hay algunas instalaciones ligadas al sector del mármol, ésta es una de las actividades industriales importantes del municipio y se ha ido consolidando en los últimos años. La industria del calzado también ha generado muchos puestos de trabajo últimamente.
Fiestas
Los vecinos de Benablón tienen por patrón a San Antonio Abad, y en honor a él celebran sus fiestas patronales en enero. Se trata de unas pequeñas fiestas que se extienden durante un fin de semana y que se resumen en un arroz gigante para los vecinos, unas actuaciones musicales y la procesión con el santo por las calles del pueblo.
Los habitantes también celebran la noche de San Juan con la tradicional hoguera.
Centro Social
Benablón posee un pequeño centro social que hace las veces de centro lúdico y cafetería para los pensionistas del pueblo, además de restaurante en caso de que se solicite el alquiler de su servicio como tal para alguna celebración.
En este centro se suelen reunir los fines de semana todos los vecinos para participar de algún tipo de evento lúdico.
Benablón también posee un consultorio médico que recibe asistencia tres veces por semana y un colegio público con escuela unitaria para los escasos niños de la población.