Las ruinas del castillo de Felí están situadas a unos 12 kms al sur de la ciudad de Lorca, a cuyo término municipal pertenece el paraje.
La fortaleza se construyó en un puntal rocoso de las estribaciones meridionales de la sierra de Almenara, irguiéndose unos 200 m sobre los terrenos inmediatos, que corresponden a la llanura aluvial del Guadalentín.
Al lugar se puede acceder partiendo desde Lorca en dirección a Águilas. A 12 kms, a la altura de la localidad de Purias, se toma a la izquierda la carretera local que conduce a Aguaderas y Mazarrón por Morata. Tras un kilómetro recorrido, existe un desvío a la derecha que conduce al caserío y la ermita de Felí, desde donde es ya visible la fortaleza.
El origen del castillo se encuentra en un momento indeterminado que quizá se pueda situar en torno al siglo XII, en plena época islámica. Se trata de una fortaleza que daba seguridad y cobertura administrativa a una de los núcleos poblados del campo de Lorca.
Con casi toda seguridad nos encontramos ante un hisn o castillo rural, con numerosos paralelos en el antiguo reino de Murcia. En época cristiana la fortaleza es muy posible que se convirtiese en una atalaya de la red defensiva centralizada en la fortaleza lorquina, custodiando, por su estratégica situación, las avenidas provenientes del valle del Guadalentín y de las sierras prelitorales.
El castillo de Felí, o Felix, se encuentra catalogado como Bien de Interés Cultural por la Disposición Adicional Segunda de la Ley 16/1985, de 25 de junio del Patrimonio Histórico Español.